El inicio de este gran día se vivió con mucho entusiasmo desde tempranas horas de la mañana, en los tres niveles del Plantel, en donde los alumnos y personal del plantel confeccionaron bellas alfombras y altares para recibir a Jesús resucitado. El Cuerpo y la Sangre de Cristo, se vivió intensamente en su caminar, recorriendo y bendiciendo todos los ambientes del colegio. Los alumnos, profesores, personal, ex alumnos y padres de familia, demostraron su gran devoción a Cristo, mediante cánticos, oraciones y ofrendas en cada altar dedicado a nuestro Señor.